Aunque la práctica deportiva regular puede ayudar a calmar la ansiedad y el estrés y prevenir las depresiones los deportistas amateurs y profesionales no están libres de sufrir estos problemas. Como el resto de personas los deportistas pueden sentir el estrés y la ansiedad en primera persona y como los expertos explican en todos los casos estos problemas derivan de factores externos al propio deporte, como la química del cerebro, las actas expectativas personales y los conflictos relacionales.
La ansiedad y el estrés en los deportistas
Los deportistas profesionales pueden llegar a sentirse desanimados y a ponerse muy tristes al no lograr cumplir ciertas metas o a sentirse vacíos cuando ya creen haberlo logrado todo, pero sin duda, como explican los profesionales de la psicología, esto no es una depresión.
Más bien se trata de una fuente de ansiedad y estrés que deriva de las expectativas extremadamente altas que suelen tener los propios deportistas, o en otros casos sus familiares, entrenadores y fans. Al no cumplir con sus propias expectativas o con lo que muchas personas esperan de ellos los deportistas pueden llegar a sentirse frustrados y estresados en algunos momentos de sus vidas.
Además de entrenar a nivel físico resulta fundamental que los deportistas profesionales o de alta competición entrenen también para saber manejar la ansiedad y el estrés. En caso contrario su rendimiento puede llegar a bajar y pueden desarrollar depresiones o ansiedad crónica. Es importante tener en cuenta que el deporte es el trabajo de estos profesionales y por tanto, como leemos en el artículo Cómo calmar y manejar la ansiedad en el trabajo dedicado a un público más general, será fundamental que los deportistas también aprendan a establecer algunas claves para poder rendir en el trabajo sin que esto les suponga una fuente de estrés continuo.
La preparación de los atletas no se limita sólo a lo físico, sino que también resulta especialmente importante aprender a manejar el estrés y la ansiedad. Todos sentimos estrés y ansiedad en la vida y en el trabajo pero es fundamental controlarlo para focalizarnos con más fuerza en nuestros objetivos. Es importante que los deportistas aprendan a que estos sentimientos y sensaciones no les desborden para transformar toda esta energía en algo positivo.
Además esto debería extenderse también al ámbito de los entrenadores. Ya que en muchos casos estos profesionales ejercen una presión excesiva en los deportistas que puede llegar a ser altamente contraproducente para ellos.
Otra de las mayores fuentes de ansiedad y de estrés para los deportistas son las lesiones. Cuando un deportista tiene una lesión es importante que cuente con el apoyo de un psicólogo deportivo para poder recuperarse de forma eficiente y volver a rendir como antes.
Asimismo, también es posible que los deportistas desarrollen depresión como cualquier otra persona de la población. Un deportista puede sentirse triste, estar desmotivado, sentir desinterés y desesperanza. En la mayoría de casos los expertos recomiendan realizar terapia y complementarla con medicación para superar estos problemas, ya que en la mayoría de estos casos se trata de problemas a nivel químico. La mayoría de los deportistas no suelen hablar de cómo se sienten a nivel emocional sino que más bien suelen hablar de sus logros físicos y visibles. La gente considera que son héroes y tienen mucha fuerza a nivel físico y mental pero esto no siempre es verdad y hay profesionales de deporte que pueden llegar a sentirse mal como cualquier otra persona. Es fundamental que los deportistas se sientan apoyados y controlados en todo momento para lograr rendir al máximo tanto en el plano físico como también en el plano mental.
Existen deportistas que pasan toda su vida con problemas depresivos sin diagnosticar. La gente que los conoce considera que ésta es su forma de ser, pero si fueran tratados de forma profesional conseguirían superar estos problemas y lograr un mejor rendimiento en sus deportes y una vida más feliz.
Ahora bien, también existen muchos deportistas que no dejan que su depresión ni la ansiedad o el estrés les limiten. Aunque tengan problemas de pensamiento negativo si tienen unas cualidades atléticas únicas y aprenden a desconectar del exterior cuando practican su deporte sin duda pueden conseguir muy buenos resultados. En todo caso igualmente es imprescindible que estos profesionales soliciten ayuda profesional porque de lo contrario al final de la temporada se quedarán totalmente vacíos y tendrán que empezar de cero.
Por último encontramos también que el consumo de sustancias para mejorar el rendimiento u de otro tipo de drogas puede tener también mucho que ver con las depresiones en los deportistas.